Cuando hay falta de liquidez se agudiza el ingenio y como no queremos
quedarnos en casa lamentándonos de los gobernantes, etc, nos montamos un
picnic y a rodar.
Los días son muy cortos así que nos ponemos en marcha tempranito.
Chulilla es nuestro destino, son 172 Km de ida, hemos pasado varias veces
por delante y al final decidimos hacer una salida dedicada a esta bella
población.
Salimos desde Denia y vamos por la costa hasta enlazar con la N332 hacia
Oliva, circunvalamos Gandía y nos tomamos el cafetito en el conocido bar
Vicent de Favara.
Llegamos a Cullera y tenemos un mini trozo de autovía que nos lleva hasta
Sueca, luego un trozo de obras y finalmente la circunvalación de Valencia,
absurdamente limitada a 80 Km/h con 6 (seis) carriles debido a las
inexistentes obras.
La calzada romana tardaron menos tiempo en hacerla, seguro.
Después de circunvalar parcialmente Valencia cogemos la CV35 hacia Ademuz y
salimos en Losa del Obispo hacia Chulilla.
La primera impresión es buena.
Chulilla y su castillo, que fue construido por los romanos.
Con la llegada de los musulmanes, guerras carlistas y un terremoto del
siglo XVIII solo queda una roca con una muralla.
Nos acercamos con la moto hasta donde podemos circular legalmente
39º39'27"N 0º53'42"W.
En la sombra hace un poco de frío.
Por el sendero SL-CV-74 nos dirigimos hacia el famoso "charco azul".
Esto me recuerda a las famosas "zamburguesas" de aquel programa llamado
"humor amarillo".
Otras "zamburguesas".
Extrañas formas rocosas.
El famoso "charco azul".
Más que azul yo lo veo verde.
Hay una pasarela como la que vimos en Castril (hay crónica de ello) y
decidimos probar a ver si nos aguantaba.
La cosa se va complicando.
Los gatos son animales finos y esbeltos, pasan por cualquier sitio.
Me refiero a los gatos de 4 kilos no a los 105 que tengo yo, juas.
Silencio absoluto salvo algún crujido de la madera al descargar mi
peso.
Yo no tengo la culpa que la madre naturaleza me atraiga con tanta fuerza,
juas.
Yo también estaba, je, je.
Justo al disparar se oyó un crujido de madera que me estremeció el
alma.
Volvemos sobre nuestros pasos porque el camino se acaba.
La vuelta siempre se hace más corta que la ida.
Las "zamburguesas" de antes.
Es curioso que el río Turia se reduzca apenas a este poco caudal.
Cogemos la moto y nos acercamos al siguiente punto.
Subiendo hacia la iglesia atravesamos calles donde apenas cabía mi moto,
pero lo conseguimos.
Dejamos la moto protegida detrás de la fuente 39º39'20"N 0º53'35"W.
Es el punto más próximo hasta la subida del castillo.
La entrada.
Sinuosa carretera que nos lleva a Chera y Requena.
El campanario que tan alto se veía antes queda reducido desde esta
perspectiva.
Justo ahí tenemos la moto.
Ampliamos. Ahí.
Breve recorrido de apenas 100 m.
Se acaba el trayecto hacia el sur.
Cualquier día de estos me la voy a dar...
Volvemos sobre nuestros pasos y vamos hacia la cara norte.
El castillo en sí carece de interés salvo por las maravillosas vistas que
ofrece desde todos los ángulos.
Vistas hacia el Oeste.
Chulilla en todo su esplendor.
En lo alto de ese cerro tienen una cruz y un depósito de agua que luego
iremos a cotillear.
Los famosos cañones del Turia inmediatamente después del embalse de
Loriguilla.
Esto no es obra de la naturaleza, algún desalmado pensó que esta chumbera
era una imagen del comecocos.
Vamos a rodear el castillo por debajo y observamos donde antes saqué el
pie, la torre del homenaje.
El camino es precioso con extrañas formaciones rocosas.
Vista hacia el Sureste, el agua corre libre, ya no hay más embalses hasta
llegar a Valencia.
Je, Je.
En algunos tramos el camino está lleno de hierbajos.
Oí correr bichos, pero
no le dije nada a la Gatha.
Esa china de la izquierda está a punto de caerse.
En el pueblo encontramos extrañas construcciones, estaban ampliando hacia
arriba y no es muy lógico poner un pilar encima del hueco de un balcón, digo
yo.
Vista desde la cruz.
39º39'24"N 00º53'18"W.
Fue una lástima coger estas fotos a contraluz.
Ya tenemos excusa para volver otro día, je, je.
Un premio para la Susi que con sus 107.000 Km se portó como una campeona
por esos caminos de cabras.
Este trozo era de los buenos.
Son las 17:00h y nos queda poca luz solar, nos abrigamos bien y volvemos a
Denia.
Hasta otra, Chulilla.
Miauuuuuuuuuuuuuuuu.
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