Pues eso, un pinchazo en plena CV-60 nada más pasar Castelló de Rugat.
Al ser un neumático con cámara de nada sirven los espráis antipinchazos y más si se ha degollado la válvula.
He tenido que buscar el plural de espray en el diccionario para escribirlo
bien.
No se va a escapar.
Llegamos al concesionario oficial de Gandía.
Han sido unos 25 km de recorrido.
Mientras reparan el pinchazo nos damos un pequeño banquete en una pastelería cercana.
Algo sencillo.
Ahora aparcamos cerca de los Molinos de la Plana.
Estos canales fueron cortados por los romanos para meter agua del mar en el interior y crear salinas para su posterior secado.
Y después de esto cada mochuelo a su olivo y otro día más.
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